Desde el primer momento en
que comiences a percibir ingresos, sin importar la cantidad, guarda un monto
para que tengas una reserva en caso de emergencias o para cumplir tus metas.
Busca y compara, con base en
tus necesidades, los mecanismos de ahorro o inversión que te ofrecen las
instituciones.
Si eres padre o madre
comienza a inculcar en tus hijos la educación financiera, mencionarles la
importancia y los frutos del ahorro y la inversión a largo plazo.
La capacidad de ahorro en la
actualidad se ve limitada por el modelo actual del consumismo en donde se busca
estar bien a nivel social, por ello generalmente se gasta más de lo que se
tiene.
Por otro lado hay que evitar
definir tu ahorro con base en lo que te sobra, sino verlo como un pago para ti,
un fondo que te ayudará a afrontar emergencias y a costear necesidades o
incluso metas futuras.
Ahorrar para
el retiro no debe verse como un sacrificio o como algo que
llegará solo, sino como un recurso que generará mayor tranquilidad y que puede
ser una protección futura, pues con el paso del tiempo se generan gastos o
emergencias que te descapitalizan como la atención a la salud o el pago de
créditos o deudas.
C.P. Alejandro Rojas Rubio
Asesor Financiero y Patrimonial.
E-mail: arrjam@gmail.com
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